Adell, J. (en prensa). Tendencias en educación en la sociedad de las tecnologías de la información. En M. Área (Coord): Educar en la sociedad de la información. Bilbao: Descleé de Brouwer.
Para empezar este comentario me gustaría destacar los objetivos que persigue este texto, que son: darnos a conocer el potencial de las nuevas tecnologías en la sociedad en la que vivimos y hacernos conscientes de que éstas tecnologías nos condicionan y forman parte de nuestras vidas, aunque muchas veces no nos demos cuenta de ello.
Aun así, creo que el principal objetivo es, como muy bien comenta J. Adell en la introd
ucción, mostrar las implicaciones que las nuevas tecnologías de la información y la comunicación están comenzando a tener en la educación.
Este texto lo podemos dividir en cinco partes, de las cuales, la cuarta se divide a su vez en cinco apartados.
En primer lugar nos encontramos con una introducción que nos sitúa en el tema que vamos a tratar durante todo el texto y a su vez, el autor nos muestra el propósito principal de éste.
En el primer bloque titulado “la evolución de las tecnologías de la información y la comunicación” el autor nos intenta poner en contacto con los grandes cambios que se han ido sucediendo a lo largo de la historia. El primero de ellos fue el lenguaje oral, ya que la palabra hablada proporcionó a los humanos un medio de comunicación, un medio que les permitía transmitir sus pensamientos mediante sonidos. La segunda gran revolución fueron los signos gráficos, que permitió preservar información para la posteridad o para los no presentes el registro de lo dicho-oído. La tercera fue la aparición de la imprenta, que significó la posibilidad de producir y distribuir textos en masa y contribuyó a una revolución en la difusión del conocimiento. La cuarta y última revolución a la que el autor hace referencia es la que estamos viviendo hoy: la de los medios electrónicos y la digitalización. Ésta depende de numerosos factores sociales y económicos, y no sólo tecnológicos.
En la segunda parte se profundiza la última revolución comentada antes. Primeramente nos define las nuevas tecnologías como el conjunto de procesos y productos derivados de las nuevas herramientas (hardware y software). Después nos habla del cambio que la digitalización supone en el tratamiento de la información y como consecuencia, en nuestros hábitos, nuestras relaciones de comunicación, e incluso, de nuestras formas de pensar.
En la tercera parte se nos explican algunas de las repercusiones de las nuevas tecnologías. El autor habla de tres repercusiones importantes, pero hay una que me gustaría comentar: “el aumento de ruido en la comunicación”. Hoy en día tenemos una gran cantidad de información que puede llevarnos a una sobrecarga cognitiva, con lo cual el problema con el que nos encontramos actualmente ya no es conseguir información, sino seleccionar la más importante.
La cuarta parte se titula “hacia la sociedad del aprendizaje”. Este apartado se centra más en el tema de la educación y contiene una serie de ideas muy importantes. La primera que debemos destacar es el peligro de una nueva fuente de discriminación, de una división entre los ricos y los pobres. Por eso, la escuela pública juega un papel muy importante: garantizar el derecho al acceso de la información y formación necesaria para ser unos ciudadanos críticos y responsables.
La segunda idea es la necesidad de adaptación de los roles (profesor/alumno) a los nuevos entornos de enseñanza/aprendizaje. El profesor debe ser el guía, el consejero sobre las fuentes de información, mientras que los estudiantes deberán ser agentes activos en la búsqueda, procesamiento y asimilación de la información.
Finalmente, para acabar el texto, el autor termina con las conclusiones.
La escuela tiene que evolucionar y tiene que incorporar las nuevas tecnologías, ya que forman parte de nuestras vidas. Esto no se puede hacer sin la ayuda de los profesores, que deben de dejar de verse como proveedores de información, y deben adquirir su nuevo rol: creador de hábitos y destrezas en la búsqueda, selección y tratamiento de la información.
Al mismo tiempo, la educación en la sociedad de la información ha de ser un factor de igualdad social, debe evitar las diferencias sociales existentes y debe de ser un derecho básico para todos.
Personalmente creo que el autor ha conseguido mostrar lo que pretendía: hacernos reflexionar sobre la importancia de las nuevas tecnologías en la educación.
No podemos evitar los cambios tecnológicos que se producen en nuestra sociedad, con lo cual debemos adaptarnos a ellos ya que forman parte de nosotros. Los docentes deben dar un buen uso de las nuevas tecnologías e introducirlas en clase como algo natural, algo que es útil y lo más importante: necesario.
